Fuente: Gizmondo
Para hacer mejores fotos no hace falta invertir en un equipo profesional ni en cursos avanzados de fotografía. A nivel aficionado es suficiente con la práctica y un poco de creatividad, especialmente cuando se trata de convertir una típica foto aburrida en algo más original y llamativo.
- Tómate diez segundos para decidir el mejor ángulo: Antes de disparar, piensa cuál es la perspectiva más interesante. Si estás haciendo una foto de un objeto, querrás estar a la altura del objeto. ¿Y si te mueves un poco a la izquierda o a la derecha para encontrar un ángulo más original que la línea recta?
- Dispara a través de algo: Quieres hacerle una foto a una persona, un objeto o un tema en concreto. Ahora añade algo desenfocado en primer plano para darle más profundidad y complejidad a la toma. Puede ser un grupo de personas, las hojas de un árbol o incluso tus dedos causando un interesante efecto de viñeteo para encuadrar la foto.
- Ve en contra de la multitud: Llegas a ese lugar tan turístico y ves que todo el mundo está tomando la misma foto desde el mismo punto y en el mismo ángulo. Prueba a pensar diferente y haz algo para cambiar la composición: dispara desde enfrente, desde arriba, boca abajo; en un ángulo extraño, inesperado, original…
- Si no hay suficiente luz, encuéntrala: La iluminación es demasiado importante como para conformarse con la que tienes disponible. Si no hay suficiente luz: muévete hasta la ventana, añade tu propia iluminación o vuelve en otro momento del día (idealmente durante la hora mágica).
- No dejes de encuadrar tus capturas: Usa objetos, personas y cualquier otra cosa se te ocurra para mejorar el encuadre de tus fotos. El encuadre y la composición crean una dinámica más interesante y te permiten contar una historia a través de la atmósfera de la fotografía.